Un atrevido fan se subió ayer en la noche al escenario en el estadio azteca, sorprendiendo a la seguridad y a la propia Shakira. Los elementos encargados de que este tipo de situaciones no sucedan, intentaron retirar pronto al joven, pero ya era demasiado tarde, Shakira lo tuvo que defender, le concedió una selfie, un abrazo y hasta un beso, provocando así la envidia de todo el estadio.
Cabe mencionar que el chico ya había cometido la misma hazaña hace 7 años, en un concierto en Tijuana en el año 2011.
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